lunes, 30 de abril de 2018

Blanca como la nieve, roja como la sangre, Alessandro D´Avenia

Entre mensajes de móvil, deberes, pósters, canciones, partidos, motos, miradas y sonrisas se encuentra Leo, un joven inmerso en el torbellino de la adolescencia. Una etapa de profesores insoportables, padres que no entienden nada, apuestas con compañeros de instituto, victorias memorables y derrotas imposibles, amigos inseparables y amigas como hermanas, cartas por leer, mensajes por enviar y amores que no se olvidarán jamás. Un universo en clave en el que irrumpe un nuevo profesor, un verdadero soñador, que pone a prueba a sus alumnos y los obliga a plantearse preguntas acerca de la vida y de sus propios sueños. Unas cuestiones que a Leo le cuesta responder, pero que le acercan poco a poco al incomprensible y lejano mundo de los adultos.
Además, Leo tiene un enemigo al que teme: el color blanco. Porque para Leo todas las emociones tienen un color, y el banco es la ausencia la soledad y la pérdida. El azul es el color de la amistad y el de los ojos de Silvia, su mejor amiga: leal, serena y su apoyo constante. El rojo, en cambio, es el color del amor, de la pasión, de la sangre; rojo es el color de los cabellos de Beatrice. Porque Leo ahora ya tiene un sueño, y se llama Beatrice, aunque ella todavía no lo sabe.
Cuando Leo descubre que Beatrice está enferma y que su enfermedad está relacionada con ese blanco que tanto le asusta, deberá buscar dentro de sí mismo, sangrar y renacer para entender que los sueños no tienen fin y que siempre hay que encontrar el coraje para creer en algo más grande.
Una novela valiente que, a través del monólogo de Leo -a veces despreocupado y brillante, a veces más íntimo y afligido- cuenta lo que sucede en la vida de un adolescente cuando irrumpen la incomprensión y el sufrimiento.

Asesinato en el Orient Express, Agatha Christie

En un lugar aislado de la antigua Yugoslavia, en plena madrugada, una fuerte tormenta de nieve obstaculiza la línea férrea por donde circula el Orient Express. Procedente de la exótica Estambul, en él viaja el detective Hércules Poirot, que repentinamente se topa con uno de los casos más desconcertantes de su carrera: en el compartimiento vecino ha sido asesinado Samuel E. Ratchett mientras dormía, pese a que ningún indicio trasluce un móvil concreto. Poirot aprovechará la situación para indagar entre los ocupantes del vagón, que a todas luces deberían ser los únicos posibles autores del crimen. Una víctima, doce sospechosos y una mente privilegiada en busca de la verdad: Agatha Christie construye con esta novela una intrigante historia de suspense que desencadena en una resolución magistra

El candor del padre Brown, G. K. Chesterton

El padre Brown es un sacerdote bajo, miope, de cara redonda y aspecto normal, capaz de resolver los más intrincados problemas policíacos con su observación, su aparente ingenuidad, su lógica... Y su fe, que es la piedra angular de todo su edificio.
Se enfrenta a diferentes problemas y, además de resolverlos, nos da una “moraleja”. Utiliza su ingenio para formular paradojas típicas del humor inglés: se opone a los falsos místicos, a los falsos milagros. Mira a los monopolios capitalistas con tan poca simpatía como a los bolcheviques. Su “candor” —su sentido común— resuelve todos los enigmas. Pero lo que le interesa es lo que está detrás: el misterio del hombre, de todo hombre, asesino o víctima.
Son breves relatos, líricamente escritos, sobre el pequeño y modesto sacerdote que soluciona crímenes, imaginándose dentro de la mente y el alma del criminal y entendiendo sus motivos.
Las historias están llenas de paradojas, perspicacia y fantasía “chestertoniana” que ve lo extraordinario en los hechos cotidianos.

Qué poca prisa se da el amor, Martín Casariego

Andrés es un excelente estudiante. Sin embargo, ha sacado un 0.5 en selectividad, por lo que tiene que quedarse en verano estudiando. Como ya sabe todo, se distrae leyendo y se lamenta de no haber vivido una historia de amor sin darse cuenta de que ya ha empezado a vivirla: Fátima, la chica que acude a limpiar todas las mañanas a su casa, ha empezado a fijarse en Andrés.

Corre, Benito, corre. José Luis Olaizola

https://imagessl1.casadellibro.com/a/l/t0/01/9788482396101.jpgBenito es un chico de pueblo que siempre quiso ir a Madrid, pero cuando su padre debe trasladarse a la capital por motivos de trabajo, la realidad resulta ser mucho más dura y menos idílica de lo que se había imaginado. Para empezar, entra con mal pie en el nuevo colegio y tiene problemas de integración: no se adapta, no encuentra amigos y, para colmo, acaba enfrentándose con Honorato, un chico agresivo, mucho más fuerte que él y de quien acaba teniendo que huir con frecuencia. La perspectiva cambia cuando, gracias a su hermana, descubre que los padres de Honorato tienen graves problemas con el alcohol y las drogas. Aunque también influye Moncho, el profesor de atletismo, que ha visto en Benito madera de campeón...



domingo, 29 de abril de 2018

El juego de Ender, Orson Scott Card

La Tierra se ve amenazada por una especie extraterrestre de insectos, seres que se comunican telepáticamente y que se consideran totalmente distintos de los humanos, a los que quieren destruir. Para vencerlos, la humanidad necesita un genio militar, y por ello se permite el nacimiento de Ender, que es el tercer hijo de una pareja en un mundo que ha limitado estrictamente a dos el número de descendientes.

Ender nace para ser entrenado en una estación espacial después de que su hermana mayor y su sádico hermano Peter hayan sido declarados no aptos. Los jóvenes se distribuyen en grupos que compiten entre sí, en gravedad cero, con armas que paralizan sus armaduras. Ender asciende rápidamente en la jerarquía de la estación y se convierte en un líder nato, en la persona capaz de dirigir a las flotas terrestres contra los insectos de otros mundos.

Los guardianes del agua, Miguel Aranguren

Novela de viajes y aventuras situada en una zona de Kenia donde las condiciones de vida son extremadamente duras pero donde se encuentran corazones nobles.
A lo largo de la historia, muchos hombres y mujeres han sucumbido al sueño de África. A Paula, enfermera en el hospital de La Paz de Madrid, el continente negro le había robado el corazón ya de niña, sin ni siquiera haber puesto un pie en sus tierras. Un buen día, un niño llamado Esinyen -que en lengua turkana significa "el que nació en la arena"- llega a España para que le realicen una complicada operación que le salve la vida. Y, entonces, el magnetismo de África consigue que el sueño de Paula se haga realidad.
Los guardianes del agua es una novela de viajes y aventuras ambientada en tierras turkana, alrededor del lago del mismo nombre situado al noroeste de Kenia. Las condiciones de subsistencia son extremadamente duras, como comprobará Paula durante su estancia, en la que conocerá también la ambición desmedida de los últimos esclavistas de la historia y la generosidad sin límites de los misioneros.

Blanca como la nieve, roja como la sangre, Alessandro D´Avenia

Entre mensajes de móvil, deberes, pósters, canciones, partidos, motos, miradas y sonrisas se encuentra Leo, un joven inmerso en el torbel...